Desde 2004 Blog sobre música chilena, registro, información, comentarios, análisis y divulgación.
31 ago 2009
CHILE: PAÍS DE TALENTOS
FERNANDA URREJOLA EN CAMPAÑA
30 ago 2009
VENDER MI PAUTA
Un anónimo me aseguró en un foro que se paga a los medios por las notas publicadas en los diarios. Con toda responsabilidad, según mis presupuestos y experiencia jamás un artista nacional podría pagar los centímetros que cuesta un espacio en los medios de papel, al menos no conozco músico chileno que pueda comprar pauta y tampoco un medio que me haya ofrecido pagar por una entrevista. Y para ser claro la única vez que alguien me ofreció dinero fue un periodista de la productora de Rodrigo Danus que quería las fotos del supuesto matrimonio de Nicole y Sergio Lagos, algo que de haber ocurrido tampoco sería mi negocio. Entonces lo que se puede leer en revistas y diarios no es más que información que de una u otra manera es material, noticia o espacio para un medio, auspicios y lectores. Pero quizás no muchos saben que detrás de cada nota no solo hay un protagonista y un periodista que la escribe, también hay fuentes cercanas, una plana editorial, un editor, relaciones públicas, intereses y más interesados. Es cierto, hay muchos acuerdos que se cierran en las oficinas de marketing y muchas órdenes que llegan desde la plana editorial que los periodistas deben acatar como lo que seguramente debió suceder con la nota que diario El Mercurio publicó de Los Huasos Quincheros (en ninguna línea aparece un factor noticioso que la justifique) entonces queda la duda de cómo siguen pasando este tipo de cosas que no es muy distinto al tipo de periodismo que se imprimió en la década de los 80’s. Detrás de cada nota hay gestión, llamados, acuerdos, periodismo, publicidad, marketing y una editorial.
Lo de Los Quincheros en El Mercurio son algunas notas que no se entienden y permiten la duda, y es casi tan inútil como el resumen de los capítulos de “Dónde Esta Elisa” que imprimen a diario en LUN y Publimetro. Una industria como la televisión además de publicidad necesita de prensa pero cómo es posible que los capítulos de una serie de ficción sean la noticia más importante del día en un país que necesita de mejor educación y medios más diversos entre otras necesidades que algunos están interesados en no plantear. Y si se discute lo que ocurre en las páginas de Espectáculos, por qué ningún medio cuestiona los resultados de los premios Altazor y sólo se limita a informar lo que sucede en la ceremonia de premiación cada año sin conocer ni la mitad de las obras galardonadas, o que se fiscalice qué ocurre con los proyectos que el Estado financia a través de los fondos concursables, como pagarle una gira y un disco nuevo a un artista que desde que inicio carrera solista depende de los derechos de autor que su ex grupo reporta y que probablemente poco importa si sigue o no en la música.
Si es o no noticia depende de quien la escribe y para quien la lea, el punto está en hacer que la información que se imprime sea lo más cercana posible a la realidad y que ese contenido tenga alguna u que otra representatividad, pero injustamente en este país se le ha dado espacio, crédito e importancia a un montón de personajes que sólo se representan asi mismos y su ego, o a su Club de Toby periodístico que le avala los libros, película, videos clips y han sobredimensionado sus columnas de opinión.
La credibilidad de un medio no la da el tipo de notas sino el periodismo que se hace, y yo no voy a dejar de leer El Mercurio después de ver El Diario de Agustín, porque si de credibilidad se trata no habría que abrir ningún diario chileno. Para informase hay un montón de otros medios como la experiencia y el compartir con otros, la prensa no hace más que fotografiar y hacer titulares en torno a algo que quieren convertir en noticia. No vale la pena y tampoco creo que alguien tenga dinero para estar comprando centímetros en páginas donde la Bolocco es tan “artista” como Madonna.
Los Huasos Quincheros tal vez no les importan a muchos mientras que para otros representan uno de los sonidos más nefastos que se conocen de la música chilena, no precisamente porque sean malas composiciones o músicos sin talento, sino porque fueron el canto de una estrategia comunicacional de la Cultura Pinochetista, y si El Mercurio en el 2009 les quiere seguir dando espacio es su condición y el riesgo de tirar por la borda el tipo de objetividad que han querido ganarse en los años de democracia. Aunque este país tiene poca memoria y un artículo no le cambia la vida a nadie, salvo quizás a quien estudio periodismo en la Universidad porque tenía objetivos y termina redactando lo que otros quieren.
Durante los últimos 5 años me he dedicado a difundir y ofrecer contenidos musicales a los medios de comunicación, y siempre van a existir proyectos más difíciles que otros pero creo que todos merecen su tiempo y un espacio. Pero no dejo de sorprenderme con muchas de las notas que se publican como “noticia”, porque ya le leí hace semana en El País o porque simplemente no me parece noticia todo lo que titulan. Por eso jamás veo Teletrece ni 24Horas completo, ni menos leo La Nación o Las Últimas Noticias, creo que hay muchas mejores cosas que leer en Twitter o hacer en la cama junto a mi novio.
¿Por qué todos los días los noticieros de TV tienen los mismos titulares y la misma pauta de discusión con los candidatos? No es precisamente porque se pongan de acuerdo ni porque el mismo comando controle todo lo que se dice, se debe a que los todos los editores son de una misma generación y probablemente la misma escuela, por lo que es fácil entender que el origen está en la mirada y el enfoque que aprendieron y les dieron a deducir.
Detrás de cada información que se lee existen más intereses y deberes de los que pensamos, el punto está en nunca perder el factor duda, y el ejemplo más cercano; El caso de las farmacias y cómo lo abordaron cada uno de los medios basta para saber que la independencia tiene un limite y un fondo, y que no se puede ser objetivo sin ser un objeto.
Yo no pago ni jamás pagaré por una nota, no tengo el dinero ni me sentiría cómodo haciéndolo, y si alguien lo hace no lo sé ni lo puedo comprobar pero prefiero desconfiar hasta de lo que yo puedo escribir, tarde o temprano puedo llegar a contradecirme, porque hoy puedo decir que estoy enamorado y quizás mañana no. Pero si tengo claro que no vale la pena joderse la vida por una nota aunque de eso dependa mi trabajo muchas veces. Y como todos también tengo intereses que defender pero hay valores y argumentos que me parecen más importantes, y por suerte ninguna de las personas para las que trabajo me obliga ni me los pide comprar ni vender. Me gustaría que varios de los cobardes que escriben y firman con seudónimos en Internet pudieran decir lo mismo.
24 ago 2009
EN EL NOMBRE DE VIOLETA
Resulta que para algunos periodistas cualquier chileno que agarra la guitarra y entona palabras es cantautor, y peor aún, se convierte gratuitamente en el "nuevo mejor heredero" de la majestuosa Violeta Parra. Todavía no editan el disco de Chinoy y algunos dicen que es "el disco chileno del año" justo cuando me entero que él hermano del solista también debuta en los escenarios. No hay tiempo para dimensionar un par de discos cuando se supone se nos están pasando otras 5 nuevas revelaciones y un par de pequeños fenómenos indies. ¿Pero de qué éxito hablamos? en realidad se trata de algunos artistas emergentes que apadrinados por algún medio o periodista empiezan a generar interés y terminan llenando salas para 100 o 200 personas porque se transforman en la figura o grupo "que hay que ver" y donde "todos tienen que estar". Está historia ya es antigua sin embargo los nombres que han sobrevivido a esas segmentadas modas no son más que 2 o 3, los demás han pasado al olvido como la mayoría de la música que se ha producido en Chile.
Si la obra de Violeta Parra tiene distribución limitada y poca visibilidad comercial qué podemos esperar para las 500 copias que se fabrican del “disco del año". Es verdad, Internet permite que los discos de hoy tengan un mayor alcance en cosa de minutos pero también que esos mismos trabajos sean rápidamente superados por otro que se está generando en algún lejano país. La mayoría de la música que se hace es irrelevante y con mucha suerte será apoyada por alguna moda o se colgará de una corriente auspiciada por alguna publicación internacional que le permita cierta fama o reconocimiento. Y como Chile es un país pequeño y Santiago una ciudad con montañas es bien sencillo para algunos proclamar nuevas y falsas verdades. Pero una cosa es inventarse un buen disco y otra muy distinta es comparar o utilizar el nombre de otro artista, como Violeta, para darle figura a discos que tienen más onda que música, o más auspiciadores que músicos. Un tema es que los hijos, nietos y familiares de Violeta usen su apellido en el nombre "del arte y la cultura" y otro es abusar de una marca que le pertenece a toda la música popular chilena para darle crédito a discos como el de Nea Ducci, Maria Perlita o Sabina Odone. Pero todo sirve para observar lo limitado que es el medio local que no conoce más música de raíz folclórica o popular para medir o hacer referencia.
Es muy bueno, sano y productivo que la gente que quiera hacer música escuche y reconozca la influencia de Violeta Parra en lo que hacen, pero otra cosa muy distinta es que el periodismo le brinde etiquetas e injustas comparaciones a discos que desde su concepción se sabe que no tendrán más tiempo sonando que el que se tardaron en componerlo. Si la música de Violeta nos interesa a muchos es precisamente porque sucede que 40 años después de su muerte sus palabras siguen siendo tan puras, honestas y representativas, y no porque haya sido comunista, la hermana del Nicanor o porque el Ministerio de Cultura y su Fundación hayan hecho un buen trabajo. Aunque también se debe reconocer el aporte puntual de algunos periodistas y medios que se han esforzado en describir y recuperar su obra (muchas piezas aún descontinuadas y pérdidas) dando origen al rescate y reedición de varios de sus discos.
Debería alguien empezar a cobrar por cada vez que un periodista usa el nombre de Violeta Parra para comentar al nuevo cantautor o cantautora de moda, sin duda que recaudarían bastante más que lo que reportan sus canciones en radios.
En el nombre de Violeta no se ha golpeado ni asesinado a nadie, pero por respeto a todo aquello que ella hizo y representó sería mucho mejor que en vez de medirla como una referencia se le pusiera más atención a su verdad y mejor consecuencia, su incomparable obra. No quiero volver a escuchar o leer una vez más eso de “es como la Violeta Parra”, si de seguro ni siquiera pueden cantar un estribillo completo de “Gracias a la Vida”. No basta con poner el nombre de Violeta para hacerle un homenaje, también que tocarla y escucharla.
LINK IMPERDIBLE
21 ago 2009
EL AUTOCOMBO DE CHANCHO EN PIEDRA
17 ago 2009
HECHAS EN CHILE; LAS HIJAS DE EVA
Javiera Parra cantó un puñado de hits junto a Los Imposibles (foto Sebastián Isla)
Ante unas 2 mil personas y por más de 7 horas se realizó el femenino Hechas en Chile. La presencia de Colombina Parra, Anita Tijoux, Francisca Valenzuela y Denisse Malebrán entre los grandes momentos del evento. El cierre estuvo a cargo de Nicole que despidió la fría noche de domingo con el mejor show de la jornada.
Media hora más tarde de lo programado subió al escenario Amarantha, la más desconocida de las figuras que participarían en la primera edición de Hechas en Chile. En 30 minutos la cantante logró empatía con el público con un show simple, canciones sin gracia y una voz prudente. Pudo haber debutado en 1995 y llamar la atención pero en el 2009 es tan sólo una más.
La ex Christianes Evelyn Fuentes subió para cantar las canciones de su debut “Sin Culpa” y comenzó su set con el clásico “Mírame Solo Una Vez” de su ex banda. Evelyn posee un timbre agridulce que empasta con sus frágiles canciones pero a su show le falta sonido.
Luego fue el turno de Nico (Nico Natalino), la ex cantante de Kudai, una chica que con buenas canciones podría ser una Hanna Montana latina. Tiene la belleza, desplante y una linda voz, pero le falta un repertorio y una banda que este a su nivel.
Denise y Aguaturbia demostraron volumen y personalidad en su show que entusiasma a la mayoría de los jóvenes presentes que jamás habían escuchado su repertorio.
El regreso de Venus con una renovada formación dejo la sensación que en los últimos 9 años no ha pasado nada en el mundo musical con pop cargado al look gótico y más entusiasmo que actitud.
El espectáculo en serio comenzó pasadas las 8 de la tarde con Los EX. La banda de Colombina Parra presentó un set de hits que entusiasmo hasta al más indiferente. Canciones como “Sacar la Basura” y “La Corbata de mi Tío” agitaron la pista del Teatro Caupolicán. La hija de Nicanor encandiló el escenario y se transformó en la gran protagonista del evento. Sonarón en clave punk rock "Idiota" de su más reciente disco y su versión para "Esta Tarde vi Llovar" hasta "Vendo Diario" de "Caída Libre" y "Llorar Aqui Mismo"(de "Cocodrila") en voz de una fanática que Colombina subió a escena. "Todos tenemos derecho a cantar" dijo la vocalista.
Luego fue el turno de Mamma Soul, el grupo liderado por Michéle Espinoza cumplió y brindó un brillante show en clave pop soul como "Eternamente" y "Consecuencia" de su primer y único disco, y el mejor momento de su set "Bendición", con una quinta vocalista invitada que supo llenar la ausencia musical de las integrantes ausentes en la formación actual.
La mejor rapera de Chile Anita Tijoux más hip-hop que nunca. Tiene la rima y actitud para mover masas en cualquier escenario del continente.
Los mayores acoples de la jornada los tuvo Javiera Mena. A pesar de sus valiosas composiciones la joven solista fue la vocalista más débil y no pudo superar las constantes fallas que amenazan históricamente sus shows en vivo. En uno de sus conciertos más masivos y expuesta a las mismas condiciones que otras 12 bandas femeninas Mena decepcionó.
En cambio Javiera Parra y Los Imposibles mostraron la seguridad musical que les ha dado la experiencia tras 15 años de vida. "Humedad" fue uno de los momentos más coreados del evento y la vocalista se despidió entre vitores para dar paso a Francisca Valenzuela, la chica del piano, que con más seguridad y escenario -que sus anteriores shows en el Teatro Caupolicán- se convirtió en protagonista con un pulcro y contundente cancionero, incluso se dio los minutos para tocar sólo con su piano "Salvador", su homenaje al ex Presidente chileno Salvador Allende y cerrar con el hit radial "Muérdete la Lengua" con un público que no quería despedirla.
Denisse Malebrán presentó el primer single de su nuevo disco, las más reconocidas de su debut solista "Maleza" y las más importantes canciones que grabó junto a Saiko. Con una voz brillante y la seguridad que la caracteriza logró uno de los mejores momentos de la jornada con "Lo que Mereces".
Pese al frío y cerca de la medianoche gran parte del público se mantuvo en el recinto para escuchar a Nicole. La solista demostró su experiencia y mayor control sobre su cancionero. "Noche" fue su mejor momento y aunque enfrentó algunas fallas técnicas Nicole finalizó con "Hoy" como el mejor set del Hechas en Chile.
Un evento femenino que no tuvo mayores sorpresas, sin colaboraciones ni invitados, sólo canciones hechas y cantadas por mujeres de 4 generaciones y distintos tintes de pop y rock. Pero las 7 horas de música fueron excesivas para una tarde tan fría donde claramente sobraron y faltaron muchas voces, pero este primer encuentro se hizo y se validó con Los Ex, Francisca Valenzuela, Anita Tijoux, Nicole, Javiera Parra y Denisse Malebrán, con canciones y popularidad para demostrar el pop, el rock y sonido que hacen muchas grandes mujeres en Chile, y comprobar que hay un público interesado y atento a lo que sucede con ellas.
Las hijas de Eva cargaran con el estigma de un femenisno que no tiene discurso ni agrupación pero que culturalmente se puede emparentar por un particular sentido de vivir y hacer la música. Las Hechas en Chile o eventos como FemFest o el Festival de Cantautoras Contemporaneas son miradas al rol que tienen las mujeres en la música chilena, que con más o menos influencia enfrentan y superan los estigmas que el machismo y las feministas etiquetaron. Esto es pop, es rock y es música desde un punto de vista femenino.